La Diputación de Málaga ha invertido en la etapa número diez de la Gran Senda de Málaga, que abarca el camino entre Pulgarín Alto y Alfarnate, un total de 9.923,27 euros, con el fin principal de mejorar la seguridad de los senderistas y su paso por el tramo que transcurre por el trazado de Malinfierno en Alfarnate.

Así lo ha anunciado la diputada de Medio Ambiente y Sostenibilidad, Marina Bravo, que ha indicado que el grueso de la actuación ha consistido en la instalación de 183 metros de talanqueras (barandillas) de madera de pino para salvaguardar la seguridad de los usuarios a su paso por la zona y evitar así posibles caídas debido a la existencia de un terraplén peligroso.

Además, la aportación del ente supramunicipal al Ayuntamiento de Alfarnate incluye  la plantación de árboles almencinos, creando una zona de sombra para el descanso de los senderistas. Asimismo, se ha contribuido a la mejora de la señalética del tramo con la instalación de un panel que recoge la información relativa a la flora, fauna y puntos de interés de la zona más cercana.

La Gran Senda

La Gran senda es un recorrido circular por el conjunto de la provincia a través de senderos, veredas, caminos y riberas que tiene como objetivo unificar cultura, historia, medio ambiente y turismo para dinamizar las economías locales, fomentar la creación de empleo y reivindicar la heterogeneidad del territorio.

El trazado recorre físicamente el 70% de los términos municipales de la provincia, pero en realidad beneficiará a los 103 municipios porque extiende su red a través de los senderos menores interconectados entre sí. Está atravesada por el corredor transversal del Guadalhorce y también por el Camino Mozárabe de Santiago, que sale de Málaga por Almogía; y también forma parte de la senda europea mediterránea que llega hasta Grecia.