Itinerario
Se trata de un sendero lineal dentro del itinerario de la Gran Senda de Málaga como etapa 3. En el trayecto atravesaremos parte del término municipal de Ronda, incluyendo las barriadas de Los Prados y la Cimada.
Senderos que enlazan:
- Enlace con el SL-a 274 Cerro de Sabora.
- Coincidencia con el PR-A 419 Las Carboneras durante 2.6 km
- Al final de la Etapa, enlace con el PR-A 250 De Arriate a Ronda y el GR 7 E4
Resumen
La Etapa más larga de la Variante 249.5, duplicando la longitud de las demás, es bastante exigente desde el punto de vista deportivo, también por los desniveles acumulados.
Los primeros 7 kilómetros son los más duros, con la travesía por la Sierra del Padrastro y del Padrastrillo utilizando sendas de montaña de firme irregular por parajes bastante solitarios y con ascenso a la máxima cota de la Variante, 945 metros sobre el nivel del mar. La dirección predominante es hacia occidente y llega a lo que era una gran cortijada hasta finales del siglo XIX, en que se instaló la Estación de Ferrocarril de Cañete la Real. La Atalaya, que hace de bisagra con el resto de la ruta, ha sido tradicionalmente una encrucijada para los viajeros y la conexión natural de esta parte de la sierra malagueña con la campiña andaluza siguiendo el río que aquí comienza. De ahora en adelante se transita, curiosamente, por la red hidrográfica del Guadalquivir, pues este arroyo es la cabecera de cuenca del río Corbones, tributario en la zona de Carmona de la gran arteria fluvial.
El resto del Sendero, en dirección suroeste, va conectando mediante pasos más cerrados de bosque o valles encajados una serie de grandes llanos, que son prados de diente o están sembrados de cereal. Secuencialmente se trata de las navas de Cuatro Mojones, el Borbollón (y la Capellanía), Zaharilla y la Alberca. Estos se sitúan a derecha o izquierda del camino, que suele transitar por la linde entre el bosque y la labor. En cada uno de ellos, además, es donde se cruzan las numerosas Vías Pecuarias que servían para gestionar el ganado en extensivo de algunas de las consideradas mejores dehesas de la Provincia de Málaga.
Por el valle de Majamoclón de la Sierra de los Borbollos es por donde precisamente se construyó la línea de ferrocarril, que se convierte en compañera de ruta durante bastantes kilómetros. La última parte es por lógica la más humanizada. En el vallecito que empieza en el Puerto del Monte la fertilidad de los suelos y la diversidad de ambientes propició el establecimiento de numerosas alquerías y cortijadas dedicadas a la agricultura, que al final generaron hace relativamente poco dos núcleos de población pedáneos de Ronda, Los Prados y la Cimada, en la práctica están muy ligados a Arriate, que está justo al lado y marca el final de Etapa.
Lo mejor
En Cañete la Real destaca el Castillo Hins Canit, levantado en el siglo IX por los árabes comandados por Wasaya ibn al-Jalí, formó parte del cinturón defensivo del rebelde Omar Ibn Hafsún contra el califato andalusí. Aparte de varias iglesias y el puente nazarí de Ortegícar y la torre alquería, en Cañete destaca la masa forestal de los pinares de repoblación en la zona de Las Carboneras y los pinares de Ortegícar. En la zona occidental destacan las dehesas de encinas próximas a la pedanía de la Atalaya.
En Arriate destaca la Iglesia de San Juan de Letrán, que data del siglo XVII y en su interior destaca la cubierta de armadura mudéjar realizada por Francisco Hernández y Andrés Valverde en 1629. Desde el punto de vista de la naturaleza señalar la Garganta del arroyo de la Ventilla, un espacio natural de gran belleza situado en las inmediaciones del casco urbano y al que se puede llegar por un sendero habilitado.