Itinerario
A través de la antigua vía pecuaria de la Vereda del Camino Bajo de Algarrobo, bajaremos desde la fortificada Vélez-Málaga hasta su puerto pesquero, a partir del que alcanzar la localidad de Algarrobo recorriendo su suave litoral a orillas del Mediterráneo. Por las playas de las tranquilas poblaciones de Mezquitilla, Lagos y El Morche llegaremos hasta el prominente Faro de Torrox, desde el que subiremos en paralelo al cauce del rio hasta el pueblo del mismo nombre, con los picos de Sierra Tejeda al fondo.
Resumen
La Etapa 3 continúa hacia levante por el litoral de la Axarquía uniendo los pueblos vecinos situados en los valles de dos de los principales cursos de agua comarcales, que toman los nombres de los mismos. Curiosamente se pasa por los términos municipales de Vélez-Málaga, Algarrobo y de nuevo Vélez, donde la Torre de Lagos marca aproximadamente la mitad del recorrido. Una vez atravesado el río Güí se entra en el municipio de Torrox.
El principio y el final de ruta se desmarcan de un camino prácticamente costero situándose ambos unos cuatro kilómetros tierra adentro. La etapa surca secuencialmente en su tramo medio los arroyos que en dirección sur vierten en el Mar de Alborán. Algunos tienen muy corto recorrido pero los ríos Vélez, Algarrobo, Güí y Torrox vienen de Sierra Almijara con caudales más importantes y forman interesantes desembocaduras.
El comienzo utiliza carriles de servicio transitando en dirección sudeste entre cultivos de subtropicales y campos de golf. A continuación se deambula por los paseos marítimos de varios núcleos de población y al lado de la N-340 por arcenes terrizos. Algunos tramos de arena, los acerados de la playa de la Ferrara y la rambla del río Torrox conforman el resto de los viales utilizados.
El litoral axárquico está mucho menos urbanizado que su homólogo del poniente malagueño, estando centrada la explotación del terreno en los cultivos bajo plástico y las frutas subtropicales. Todas estas actuaciones han dejado tan solo un rosario de islas de naturaleza que incluyen algunos de los últimos cordones dunares de la Costa del Sol Oriental y las desembocaduras de ríos y arroyos. El excelente clima ha invitado a asentarse en el litoral a las diferentes civilizaciones del Mediterráneo, encontrando en la actualidad algunos enclaves arqueológicos de primer orden. El paradigma de esta importancia estratégica e industrial en la historia de la provincia es el yacimiento romano del faro de Torrox, con un centro de interpretación anexo.
Lo mejor
Aquí se dan la mano la Málaga antigua y la del siglo XXI. La primera (Vélez-Málaga) está representada por torres almenaras y yacimientos romanos y fenicios. La segunda (Torrox) se centra en dos tipos de industrias bien distintas pero deudoras ambas del excelente clima de la Axarquía.
El turismo, por una parte, se concentra en la franja litoral, y sorprendentemente se van a poder conocer modelos urbanísticos ya extinguidos en gran parte de la Costa del Sol, correspondientes a la segunda mitad del siglo XX, conviviendo con zonas residenciales recién construidas bajo parámetros muy contrapuestos. Hay zonas pesqueras que mantienen su raigambre, líneas de casas cuyo horizonte es el mar y sus productos, que evocarán a propios y extraños épocas pasadas. Será éste uno de los mayores atractivos para el visitante.
La otra industria generada por la benignidad de los parámetros meteorológicos es la agricultura basada en cultivos arbóreos subtropicales. Estos se localizan sobre todo en los valles, aprovechando su abrigo pero también un recurso indispensable: el agua. Se tendrán a la vista explotaciones de tecnología avanzada que recién acaban de asentarse en las laderas axárquicas, pero también en otros lugares las terrazas y albarradas centenarias se habrán adaptado a los nuevos tiempos acogiendo estas otras especies y nuevos mercados.
En cualquier caso, y con esta amalgama de posibles componentes, la etapa 3 ofrece una variedad de paisajes digna de mención, entre lo rural y lo urbano y con varios sectores productivos implicados, pero todo ello profundamente imbricado con un medio físico muy peculiar que este recorrido invita a conocer.